Reseñas


Reseña: Esta noche dime que me quieres
(Federico Moccia)
                                                  
                                        
Titulo: Esta noche dime que me quieres
Autor: Federico Moccia
Género: Narrativa romántica
Editorial: Planeta internacional
Número de páginas: 384
Año de publicación: 2012

SINOPSIS:
Tancredi es uno de los hombres más ricos del mundo. Joven, apuesto y brillante, es incapaz de entregarse al amor por culpa de un terrible incidente ocurrido años atrás. Sofía era una joven promesa del piano, hasta que una estúpida discusión con su novio Andrea cambió su vida para siempre. Alegre y soñadora, decidió aparcar su carrera y sus sueños para cuidar de Andrea, en silla de ruedas tras aquella fatídica noche. Tancredi y Sofía. Dos mundos diferentes, opuestos, como el día y la noche, se verán unidos, al fin, por la lluvia y el destino.

OPINIÓN PERSONAL:
Lo primero de todo, decir que el verdadero título de este libro es 'El hombre que no quería amar'. Me fijo mucho en las portadas de los libros a la hora de decidirme entre unos u otros, y esta, concretamente, me llamó mucho la atención. Pero debo decir que nada tiene que ver el título traducido al español con la historia en sí.

Esta vez se trata de personajes más adultos que nos muestran una historia llena de engaños, dinero y desamor, que para nada tendrá el final que todos esperamos. (Con esto no estoy diciendo que no sea un buen o un mal final).

Tancredi tiene treinta y cinco años. Es uno de los hombres más ricos del mundo y se niega a ver más allá de lo que sus ojos le permiten. No cree en el amor, debido a una tormentosa historia del pasado que no deja de perseguirle- la muerte de su hermana Claudine-, y odia a la gente que sí lo hace, así que se recrea haciéndoles la vida imposible.
-Quizá te estuvieras cansando de la felicidad. Cuando vuelvas a encontrarla sabrás apreciarla
Sofía tiene veintinueve años y es una joven promesa del piano. Su novio Andrea tuvo un grave accidente de moto. Sofía estaba dispuesta a dejar lo que más le apasionaba en el mundo si con eso conseguía que Andrea saliese con vida de aquello. Y así fue, aunque por desgracia no resultó ileso y se quedó paralítico.
Desde que Sofía hizo aquella promesa no ha vuelto a tocar el piano y solo se limita a dar clases a niños.



Un día Tancredi sale a correr y a medio camino le pilla la lluvia. Intenta refugiarse en una iglesia dónde oye música celestial para sus oídos. Allí se encuentra a una chica que está moviendo los dedos al ritmo de la música mientras oye lo que otros están creando. Esa chica que imita los sonidos del piano es Sofía.


“Te miraría millones de veces sin aprenderte nunca de memoria”.

Desde ese momento, Tancredi intenta crear encuentros casuales con ella. Al principio empieza siendo otro de sus objetivos, hasta que es consciente de que no puede quitársela de la cabeza. El mayor problema es que ella tiene novio, y Tancredi está dispuesto a hacer lo que sea con tal de que pasen unos días juntos y le de a Sofía la oportunidad de conocerlo.
-A veces no sabemos apreciar lo que nos rodea. Siempre tenemos demasiada prisa...
Empieza a aprovecharse de su dinero para investigar sobre su vida e intenta comprarla de la única manera en la que se lo va a poder permitir, prometiendo pagar la operación de su novio Andrea para que pueda volver a caminar. Pero esta promesa conlleva una serie de actos que Sofía tendrá que aceptar sin rechistar. 
Y aquí es donde comienza la aventura.


-¿Qué se siente al poder tenerlo todo?
-¿Cómo sabes que lo tengo todo? Quizá me gustara tenerte a ti para siempre y, sin embargo, es algo que no tiene precio. 

Realmente alguien necesita abrirle los ojos a Travis y hacerle saber cuál es la verdad sobre la muerte de su hermana. 
Hasta que Tancredi no caiga en la conclusión no sabremos ni el cómo ni el por qué murió.

El libro tiene algún que otro fashback que te descoloca un poco, ya que cuando sucede no avisa. Pero gracias a esos flasbacks vamos a conocer mejor a todos sus personajes. ¿Por qué en el pasado se comportaban de una forma tan natural y ahora son tan "distantes" con todo el mundo? E ahí el quid de la cuestión. Sabemos lo que les ocurrió, pero no el cómo. Y hasta que no lo averiguamos (bien avanzado el libro) no sabremos porque tienen ese carácter.



-SPOILER-
Lo cierto es que no entendía porque la muerte de Claudine le afectaba de esa manera a Tancredi. Él siempre creyó que podía haber echo algo por evitarlo, ¿pero porque no quiere que la gente sea feliz en el amor, cuándo ni siquiera sabía el motivo de su suicidio?

Sofía no me ha gustado nada. Me ha parecido un personaje seco y aburrido que no transmite nada. Durante todo el libro no he dejado de preguntarme: ¿De verdad está enamorada de Andrea o está con él sólo por que siente pena? ¿Qué necesidad hay de amargarse la vida de esta manera?

Aún así, es una historia para reflexionar. Diferente a las que Federico Moccia nos tiene acostumbrados. Nada de príncipes azules, ni 'vivieron felices y comieron perdices'.
Creo que el final de esta historia nos enseña a apreciar el mundo de una forma diferente a la que todos esperamos y/o estamos acostumbrados.

Desde mi punto de vista Tancredi, Sofía y Andrea se ayudan mutuamente, y creo que existe el final adecuado para cada uno:

-Andrea se comporta de una forma egoísta siendo un completo egocéntrico, pero logra su objetivo de poder operarse la pierna gracias a Tancredi y Sofía.

-Tancredi intenta comprar el amor de Sofía, y aunque al final no lo consigue, gracias a que ella le ha hecho abrir los ojos ha vuelto a amar de nuevo, y no se siente mal por ser rechazado.

-Por último, Sofía consigue darse cuenta de que quiere ser feliz con otro. Ninguno de los dos estaba realmente enamorado de ella al haber actuado de una forma tan egoísta. Así que decide irse con Olja, puesto que es la única persona que ha sabido demostrarle lo mucho que la quiere.
-Estaba... Estaba pensando en ti. -Sofía continuó con su silencio-. Estaba pensando en cómo te he echado de menos. Pero no durante estos últimos días. Si no siempre. Estaba pensando en que podríamos ser felices, en lo bonito que sería ser una pareja cualquiera, incluso aburrirnos en un sofá, mano sobre mano, delante de la tele. Estaba pensando en lo bonito que sería discutir, decidir dónde ir de vacaciones, quizá no ponernos de acuerdo. Y en lo bonito que sería dejarte ganar... O no. -Sofía sonrió. Tancredi la vio desde lejos y continuó-: Estaba pensando en que tenías razón. He descubierto que Claudine no se mató por mi culpa y, dentro de lo que cabe, estoy más sereno. He perdido mucho tiempo. Para mí siempre ha sido muy difícil, pero al final he entendido que he tenido suerte... Te he oído tocar. —-Sofía bajó la cabeza. Movió los pies con embarazo. Después continuó escuchando-. Pero lo más importante es que tengo ganas de amar, y tengo ganas de amarte a ti. -Sofía siguió con su silencio-. Te esperaré en el bar de debajo de la iglesia, donde nos conocimos, donde no quisiste ir a tomar algo la primera vez que nos vimos. Te esperaré esta tarde... Estaré allí desde las siete. Y durante toda la noche nos estará esperando un avión que nos llevará a donde tú quieras. -Sofía exhaló un largo suspiro. Y él entendió que era como si le hubiera dicho: ¿No quieres decirme nada más? Entonces simplemente añadió-: Te quiero.
Yo no lo considero un mal final. Simplemente... es diferente.

PUNTUACIÓN: 7/10



Reseña: En nombre del amor

(Nicholas Sparks)

Título: En nombre del amor
Autor: Nicholas Sparks
Género: Novela romántica
Editorial: Roca
Número de páginas: 299
Año de publicación: 2010

SINOPSIS:
Travis Parker tiene todo lo que un hombre pueda desear: un buen trabajo como veterinario, amigos fieles e, incluso, una casa delante de un lago en una pequeña localidad de Carolina del Norte.
Le gusta la vida y aprovecharla al máximo, aunque hay algo que se resiste a probar: enamorarse.
Pero semejante propósito desaparece por completo en el momento que conoce a Gabby Holland.
Gabby es una asistente pediátrica que se acaba de mudar al barrio de Travis.
Él ha intentado ser un buen vecino, invitarla a sus barbacoas y a pasar el día con sus amigos en su lancha, pero ella ha resistido cada uno de los intentos de su guapísimo y encantador vecino, en parte porque le sería demasiado fácil sentirse atraída por él. Y eso sería un problema porque Gabby tiene novio.

OPINIÓN PERSONAL:
Me encanta Nicholas Sparks, y tal vez suene duro, pero tiene la costumbre de matar a casi todos sus personajes al final del libro y no sabia lo que me depararía esta historia. Aún así me aventuré a leerla, puesto que me encantan las historias de amor, y Nicholas, si de algo sabe, es de trasmitir los sentimientos tan especiales que crea en sus libros.

Los personajes principales me han encantado; tan normales, tan directos y sinceros.

Travis, junto con su padre, es el veterinario del pueblo. Tiene unos amigos irreemplazables con los que suele organizar barbacoas en su casa. A estas alturas todos ellos han conseguido crear su propia familia, excepto él. A sus treinta y dos años está harto de que las conversaciones con las mujeres de sus amigos se basen en su vida sentimental. Todos se preguntan, ¿a qué espera para sentar la cabeza?


-¿No se te ha ocurrido pensar que igual ella sólo rompió contigo porque estaba enfadada?
-Yo también estaba enfadado.
-¿Por qué?
-Porque quería convencerme para que fuera a ver a un terapeuta.
-Y... A ver si lo adivino... Tú le contestaste que no necesitabas ningún terapeuta.
-Mira, el día que aparezca con faldita de volantes y un gorrito con puntillas, entonces sí que necesitaré la ayuda de un terapeuta.

A Travis le encantan los animales, viajar y hacer deportes de riesgo. Tiene una hermana a la que adora (Stephanie) -aunque a veces se pasa de cotilla-. Es una chica muy carismática que nos hará soltar alguna que otra carcajada.
-Tal y como dijo Jesucristo: «Bienaventurados los vagos tumbados en barcas, porque ellos heredarán el reino del bronceado».
Travis es feliz como está. Nunca se ha enamorado, pero por supuesto que sueña con hacerlo algún día. Es solo que aún no ha encontrado a la chica ideal, hasta que aparece  Gabby en su vida.

Gabby Holland tiene veintiséis años y es asistente médica. Tiene que lidiar cada día con vómitos de bebés y un médico que se pasa de cariñoso con ella.  Se acaba de mudar a la casa de al lado de Travis y no conoce a nadie en el barrio. Apenas ve a su novio debido a su trabajo, y para colmo su perrita Molly se ha quedado embarazada de Moby- el perro de Travis-, o eso es lo que ella cree.


Harta de todo se planta una noche en casa de su vecino, y para su desgracia aquél encuentro resulta ser peor de lo que pensaba. Travis le explica que es imposible que Moby haya dejado embarazada a su perrita y que podría ser cualquier otra cosa, así que le aconseja llevarla al veterinario.
Termina por hacerle caso, pero cuando se encuentra con que Travis es el suso dicho, y que tenía razón respecto a que Moby no era el causante de aquello se avergüenza de tal manera que intenta rehuir de él. Hasta que de nuevo necesita su ayuda, y Travis, como buen profesional que es, lo hace encantado. Y no solo eso, sino que intenta integrarla en su grupo de amigos para que conozca a gente nueva.


   -No creo que sea una buena idea. Tengo novio.
-Fantástico. Pues dile que venga.
-Llevamos juntos casi cuatro años.
-Ya te lo he dicho, estaré más que encantado de que venga.
Ella se preguntó si había oído bien, y se lo quedó mirando fijamente, intentando averiguar si hablaba en serio.
-¿De veras?
-Por supuesto. ¿Por qué no?
-Ah, bueno... Tampoco podría. Está fuera, de viaje, por unos días.
-Entonces, si no tienes nada mejor que hacer, ven con nosotros.
-No creo que sea una buena idea.
-¿Por qué no?
-Porque estoy enamorada de él.
-¿Y?
-¿Y qué?
-Y... puedes seguir enamorada de él en mi casa.

Gabby termina aceptando la oferta de salir con ellos y por fin se dan la oportunidad de conocerse mejor. Los dos, junto con los amigos de Travis, pasan un día estupendo.
Gabby hace muy buenas migas con Spephanie (su hermana), y gracias a lo parlanchina que es descubre cosas de Travis que nunca hubiera imaginado. 



Pronto empiezan a despertarse nuevos sentimientos en los dos, sentimientos desconocidos hasta entonces.
Cuando dan por finalizado el día Travis le propone dar una vuelta en moto a la mañana siguiente, y Gabby, con un poco de miedo, acepta el plan. No puede dejar de pensar en Kevin (su novio), pero por otra parte tampoco puede alejarse de Travis.
-¿Qué te hace pensar que no siento lo que te he dicho?- contraatacó-. Reitero cada palabra. Pero comprendo que no quieras escucharme. Digamos que espero que tu novio sepa lo afortunado que es al tener a una persona como tú en su vida. Sería un verdadero idiota si no lo hiciera. Lo siento si te incomodo, por eso no lo volveré a repetir- sonrió levemente-. Pero, por lo menos, tenía que decirlo una vez.
Si tengo algo que objetar del libro, es que al principio no me hizo mucha gracia que estuviera dividido en dos partes.

-La primera parte nos cuenta el principio de una historia que parece ser va demasiado deprisa, ya que ocurre en un solo fin de semana. Pero cuando terminas el libro te das cuenta de lo necesaria que era esta primera parte para saber como interpretar la segunda.


-No sé qué más puedo decirte, a no ser que puedo imaginarme pasando el resto de mi vida contigo. Sé que parece una locura. Sé que únicamente estamos empezando a conocernos y también debo admitir que lo que he hecho probablemente sólo te empuje a pensar que estoy loco, pero jamás he estado más seguro de algo en mi vida. Y si me das una oportunidad (si nos das una oportunidad) me pasaré el resto de mi vida demostrándote que has tomado la decisión correcta. Te quiero, Gabby. Y no sólo por cómo eres, sino por cómo me haces pensar que podemos ser.

La segunda parte empieza a descolocarte. Sigue la historia de Travis y Gabby pero diez años después. Te quedas con ganas de saber que ha ocurrido en todo ese tiempo, al fin y al cabo, solo estaban con el principio de una relación.Te planteas la pregunta de, ¿pero a qué viene esto? y no sabes si continuar leyendo o dejarlo por donde estabas, ya que lo que habías leído hasta ahora era genial.
Pero según vas avanzando páginas la historia te va enganchando. "Un hombre se debate ante la decisión más importante de su vida..." Aquí es donde dejamos de reír para pasar a un grado totalmente opuesto, y todos nos hacemos la misma pregunta:
-¿Hasta dónde llegarías en nombre del amor?
Stephanie sólo se giró a medias.
-Ya me habías hecho esa pregunta antes.
-Lo sé- Travis vaciló-. Pero te estoy preguntando qué crees que debería hacer.
-Sólo tú puedes decidir lo que hay que hacer.
-Pero ¿qué significa eso?
Su hermana lo miró con una expresión de impotencia.
-No lo sé, Trav. ¿Qué crees que significa?
He de reconocerlo, yo lloré como una magdalena, y cada vez que me acuerdo de esta historia algo dentro de mí se reaviva y hace que quiera leerla una y otra vez. Es una historia que engancha desde el principio, y además es muy fácil de leer. 

PUNTUACIÓN: 9'50/10



Y tú, ¿hasta dónde estás dispuesto a llegar en nombre del amor?
Reseña: Bajo la misma estrella
(John Green)    

                             
 Título: Bajo la misma estrella
 Autor: John Green
 Género: Drama, romance, juvenil
 Editorial: Nube de tinta
 Número de páginas: 304
 Año de publicación: 2012

SINOPSIS:
Hazel acaba de cumplir 16 años. Y tiene cáncer. A pesar de que un tratamiento ha conseguido reducir su tumor de forma casi milagrosa, es una enfermedad terminal. Los médicos no pueden decirle cuánto tiempo le queda; solo sabe que debe vivir pegada a un tanque de oxígeno y sometida a continuos tratamientos. Desde hace unas semanas, Hazel forma parte de un grupo de apoyo donde otros chicos como ella comparten sus experiencias, en realidad ella acude más por obligación que por voluntad; ¿qué sentido tiene hablar con otras personas de lo que nadie puede cambiar? Pero su vida da un verdadero vuelco cuando conoce a Gus Waters... Os preguntaréis: ¿quién es Gus? ¿Y cómo puede cambiar una sola persona la historia de otra?

OPINIÓN PERSONAL:
Quería uno de esos libros que te calan hondo, que consiguen despertarte miles de sentimientos, que hacen que te metas en la piel del personaje y sientas lo mismo que siente él.
Al principio no estaba muy convencida sobre si este libro conseguiría trasmitirme todo lo que yo buscaba, puesto que era una historia juvenil y debería de estar narrada desde el punto de vista de dos adolescentes, y en cierto modo es así.

Hazel nos narra la historia en primera persona. A pesar de tener solo dieciséis años ha tenido que madurar de golpe debido a su trágica enfermedad. Como ya se sabe desde el principio del libro Hazel tiene los días contados, y ella lo sabe mejor que nadie. A veces intenta tomarse su enfermedad con un humor sarcástico y eso hace daño a la gente de su alrededor.

Sus padres están preocupados. Pues no sale de casa y no se relaciona con nadie. Así que deciden apuntarla a un grupo de apoyo al que se siente obligada a ir solo por verlos un poco más felices. Al fin y al cabo, está convencida de que ella es el motivo que les hace estar tan tristes.

Soy una granada- repetí-. Lo único que quiero es mantenerme alejada de la gente, leer libros, pensar y estar con vosotros, porque a vosotros no puedo evitar haceros daño. Estáis demasiado involucrados. Así que dejadme hacerlo, por favor, ¿vale? No estoy deprimida. No necesito salir más. Y no puedo ser una adolescente normal, porque soy una granada.

En el grupo de apoyo conoce a Augustus (Gus). Un chico de diecisiete años con un osteosarcoma que le cambia la vida por completo. Empiezan a hablar, y cuando descubren que a los dos les gusta la lectura Hazel le recomienda su libro favorito: 'Un dolor imperial'. Un libro que ella ha leído y releído cientos de veces, porque según cuenta, el autor de ese libro parecía entender qué era estar muriéndose, y lo más importante, es que todavía no se había muerto.
Pero es un libro inacabado, y Hazel no está dispuesta
"Esto no es una pipa"
a irse de este mundo sin saber qué les ocurrió a sus personajes. Así que deciden embarcarse en una aventura e irse a Amsterdam para poder hablar con el escritor de 'Un dolor imperial' y poder descubrir el final de la historia que tan intrigados los tiene.
Mientras leía, sentí que me enamoraba de él como cuando sientes que estás
quedándote dormida: primero lentamente, y de repente de golpe.

Gus está lleno de vida, y al igual que Hazel intenta tomarse su cáncer de la forma más natural posible. Aunque también es fuerte y valiente, no puede evitar temer el olvido. Le da miedo pensar que tanto su vida como su muerte no tengan ningún sentido para el resto de la humanidad. Es un chico atractivo, inteligente y divertido, que ha conseguido ser un pilar imprescindible en la vida de Hazel en muy poco tiempo. De la misma manera que ella lo es para él. Pasan tanto tiempo juntos que irremediablemente se enamora de ella, y durante el libro se lo hace saber en varias ocasiones.
-Estoy enamorado de ti, y no me apetece privarme del sencillo placer de decir la verdad. Estoy enamorado de ti y sé que el amor es solo un grito en el vacío, que es inevitable el olvido, que estamos todos condenados y que llegará el día en que todos nuestros esfuerzos volverán al polvo. Y sé que el sol engullirá la única tierra que vamos a tener, y estoy enamorado de ti.
-Augustus- repetí.
No sabía qué decir. Sentía como si todo en mí se elevara, como si me ahogara en una alegría extrañamente dolorosa, pero no pude decirle que también yo estaba enamorada de él. No pude responderle nada. Simplemente lo miré y dejé que me mirara hasta que sacudió la cabeza, con los labios fruncidos, se giró y se apoyó contra la ventana.
Recuerdo una frase de Hazel donde cuenta el miedo que tiene de empezar una relación con Gus porque es consciente de que su amor no durará para siempre.

El personaje que más me ha hecho reír sin duda ha sido Isaac, el mejor amigo de Gus (sobretodo cuando van a tirar huevos al coche de Mónica). Isaac sufre un extraño cáncer en los ojos que le obliga a perder la vista, y al igual que ellos también acude al grupo de apoyo. No se queja de su enfermedad puesto que sabe que muchos de los que acuden a ese grupo están peor que él. 
Hay una escena en particular que me encanta. Y es que dice que en un futuro, cuando existan ojos robots y se los implanten, podrá ver a todas las chicas desnudas. 
                                                           
Si algo nos enseñan estos tres maravillosos personajes es que hay que vivir el momento que la vida nos brinda. Ya estemos sanos o enfermos lo importante es vivir el día a día sin preocuparse del qué sucederá mañana y dar gracias por lo que tenemos.

Otros personajes de gran importancia son los padres de ambos. En esta historia también nos cuentan la perspectiva de todos ellos. Sin duda el que peor lo lleva es el padre de Hazel,                                        que no puede evitar llorar todo el rato delante de su hija.
Había dedicado buena parte de mi vida a intentar no llorar delante de las personas que me querían, así que sabía lo que estaba haciendo Augustus. Aprietas los dientes. Miras al techo. Te dices a ti misma que si te ven llorando, sufrirán, y solo serás tristeza para ellos, y no debes convertirte en mera tristeza, así que no llorarás, y te dices todo esto a ti misma mirando al techo, y luego tragas saliva, aunque la garganta no la deja pasar, y miras a la persona que te quiere y sonríes.
También conoceremos a Peter Van Houten, el autor de 'Un dolor imperial', durante el viaje que ambos emprenden a Amsterdam.
Bajo la misma estrella no sólo habla del cáncer. Este libro del que tantas ganas tienen de saber su final es uno de los temas principales puesto que gran parte de la historia se basa en él. Y al igual que Gus y que Hazel estás deseando saber que les ocurrió a la madre de Anna, al tulipán Holandes, o incluso al hámster de Anna (Sísifo) según vas pasando las páginas.

A la vuelta de su viaje la historia pega un vuelco inesperado que nos hará plantearnos el final. ¿Para qué engañarnos? Es un libro triste, por supuesto, pero no te hace llorar todo el rato. Me he reído muchísimo durante toda la historia y he disfrutado como pocas veces en mi vida. ¿Que si lo recomiendo? Sin duda alguna. Creo que es imprescindible leerlo al menos una vez en la vida. Y desde luego ha superado mis espectativas con creces.
-La nostalgia es un efecto colateral del cáncer- le dije.
-Qué va. La nostalgia es un efecto colateral de estar muriéndose- me contestó.
Durante todo el libro existen varias frases de esas que te gustaría escribirlas y releerlas una y otra vez. Frases de reflexión, como las que tienen los padres de Gus repartidas por toda su casa. Como las que os he escrito yo.

PUNTUACIÓN: 9’25/10

Me alegré cuando supe que el libro pasaría a la gran pantalla en el año 2014. De siempre es sabido que los libros son mejores que las películas, pero acabarte un libro que te ha gustado y saber que por fin puedes ponerles caras a los personajes es una buena noticia. Esperemos que sepan plasmarlos tan bien como nosotros conseguimos imaginarlos en nuestras mentes. De momento ya tienen cara. Son Ansel Elgort y Shailene Woodley's, que además coinciden en la película 'Divergent'.



-SPOILER-

En internet hay un corto de una de las escenas más impactantes del libro. Aquí os lo dejo para que le echéis un vistazo. Está realmente bien.



Abrí los cuatro archivos adjuntos. La letra era un desastre, totalmente irregular, las líneas estaban torcidas, y el color del bolígrafo cambiaba. La había escrito en varios días y con diferentes niveles de conciencia.
A pesar de que Augustus está convaleciente y moribundo, consigue sacar fuerzas y escribir esta preciosa carta sobre Hazel. Sin duda, de lo más bonito que he leído nunca.

Van Houten:

Soy una buena persona, pero una mierda de escritor. Usted es una mierda de persona, pero un buen escritor. Formaríamos un buen equipo. No quiero pedirle ningún favor, pero si tiene tiempo y, por lo que sé, tiene mucho, me preguntaba si podría escribir un discurso fúnebre para Hazel. He tomado notas, pero quizá usted podría darles forma coherente o algo así. O simplemente decirme qué debería decir de otra manera.

Lo más importante sobre Hazel: a casi todo el mundo le obsesiona dejar huella en el mundo. Dejar un legado. Sobrevivir a la muerte. Todos queremos que nos recuerden. Yo también. Lo que más me preocupa es ser una olvidada víctima más de la antigua y poco gloriosa guerra contra la enfermedad.

Quiero dejar huella.

Pero Van Houten: las huellas que dejamos los hombres suelen ser cicatrices. Construyes un espantoso centro comercial, das un golpe o intentas llegar a ser una estrella del rock, y piensas: «Ahora me recordarán, pero: a) no te recuerdan, y b) lo único que dejas tras de ti son más cicatrices. Tu golpe se convierte en una dictadura. Tu centro comercial se convierte en una herida.

(De acuerdo, quizá no soy tan mierda como escritor. Pero no puedo enlazar mis ideas, Van Houten. Mis pensamientos son estrellas con las que no puedo formar constelaciones.)

Somos como una manada de perros meando en bocas de incendio. Envenenamos las aguas subterráneas con nuestras meadas, nos apoderamos de todo en un ridículo intento de sobrevivir a la muerte. Yo no puedo dejar de mear en bocas de incendios. Sé que es idiota e inútil en mi actual estado, épicamente inútil, pero soy un animal como cualquier otro.

Hazel es diferente. Camina ligera, Van Houten. Camina ligera sin tocar el suelo. Hazel sabe la verdad: es tan probable que hagamos daño al universo como que lo ayudemos, y seguramente no haremos ninguna de las dos cosas.

La gente dirá que es triste que deje una cicatriz menor, que menos personas la recordarán, que la querían mucho, pero no muchos. Pero no es triste, Van Houten. Es un triunfo. Es heroico. ¿No es eso el verdadero heroísmo? Como dicen los médicos: ante todo, no hagas daño.
        
En cualquier caso, los verdaderos héroes no son los que hacen cosas. Los verdaderos héroes son los que OBSERVAN las cosas, los que les prestan atención. El tipo que inventó la vacuna de la viruela en realidad no inventó nada. Simplemente observó que las personas que tenían viruela bovina no cogían la viruela.

Después de recoger los resultados de mi escáner, me colé en la UCI cuando ella estaba inconsciente. Entré detrás de una enfermera que llevaba una placa y conseguí estar a su lado unos diez minutos, hasta que me pillaron. De verdad creía que iba a morirse antes de que pudiera decirle que también yo iba a morirme. La incesante arenga mecanizada de los cuidados intensivos era atroz. Le sacaban del pecho, gota a gota, aquel líquido oscuro. Los ojos cerrados. Intubada. Pero su mano seguía siendo su mano, todavía tibia, las uñas pintadas de un azul oscuro casi negro, y yo la cogía de la mano e intentaba imaginar el mundo sin nosotros, y por un segundo fui lo bastante buena persona para esperar que se muriera y así nunca llegara a enterarse de que yo me moría también. Pero después quise más tiempo para que pudiéramos enamorarnos. He conseguido mi deseo, supongo, y he dejado mi cicatriz.

Llegó un enfermero y me dijo que tenía que marcharme, que solo podía entrar la familia. Le pregunté si iba bien, y el tipo me contestó: Sigue entrándole líquido. Bendito sea el desierto, y maldito sea el mar.

¿Qué más? Es preciosa. No te cansas de mirarla. No tienes que preocuparte de si es más inteligente que tú, porque sabes que lo es. Es divertida sin pretenderlo siquiera. La quiero. Tengo la inmensa suerte de quererla, Van Houten. No puedes elegir si van a hacerte daño en este mundo, pero sí eliges quién te lo hace. Me gustan mis elecciones. Y espero que a ella le gusten las suyas.
        
Me gustan, Augustus.

Me gustan. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario